martes, 3 de abril de 2012

V. RECOMENDACIONES FINALES Y AGRADECIMIENTO. 4,2-23.

2Recomiendo a Evodia y lo mismo a Síntique que anden de acuerdo como cristianas que son; 3por supuesto, a ti en particular, leal compañero, te pido que les ayudes, pues ellas lucharon a mi lado por el evangelio, con Clemente y los demás colaboradores míos, cuyos nombres están escritos en el registro de los vivos.
4Estad siempre alegres con el Señor; os lo repito, estad alegres. 5Que todo el mundo note lo comprensivos que sois. El Señor está cerca, 6no os agobiéis por nada; en lo que sea, presentad ante Dios vuestras peticiones con esa oración y esa súplica que incluyen acción de gracias; 7así la paz de Dios, que supera todo razonar, custodiará vuestra mente y vuestros pensamientos mediante el Mesías Jesús.
8Por último, hermanos, todo lo que sea verdadero, todo lo respetable, todo lo justo, todo lo limpio, todo lo estimable, todo lo de buena fama, cualquier virtud o mérito que haya, eso tenedlo por vuestro; 9y lo que aprendisteis, y recibisteis, y oísteis, y visteis de mí o en mí, eso llevadlo a la práctica; así el Dios de la paz estará con vosotros.
10El Señor me dio mucha alegría, porque ahora podéis por fin expresar de nuevo vuestro interés por mí, pues, aunque lo sentíais, os faltaban ocasiones. 11No penséis que lo digo porque ando escaso, pues yo he aprendido a arreglarme en toda circunstancia: 12sé vivir con estrechez y sé tener abundancia; ninguna situación tiene secretos para mí, ni estar harto, ni pasar hambre, ni tener sobra, ni pasar falta; 13para todo me siento con fuerzas, gracias al que me robustece. 14Con todo, me habéis hecho un favor al tomar como vuestra mi dificultad.
15Vosotros los filipenses sabéis además que desde que salí de Macedonia y empecé la misión, ninguna iglesia, aparte de vosotros, se hizo cargo de saldar mi debe y haber. 16Ya a Tesalónica me mandasteis más de una vez un subsidio para aliviar mi necesidad; 17no es que yo busque el regalo, busco que los intereses se acumulen en vuestra cuenta.
18Éste es mi recibo por todo: tengo de sobra, he quedado bien provisto al recibir lo que mandáis con Epafrodito: es un incienso perfumado, un sacrificio aceptable que agrada a Dios. 19Mi Dios, por su parte, cubrirá todas vuestras necesidades con sus inagotables riquezas por medio del Mesías Jesús. 20A Dios nuestro Padre la gloria por los siglos de los siglos, amén.
21Recuerdos a todo consagrado por el Mesías Jesús. Os mandan saludos los hermanos que están conmigo; 22os saludan también todos los consagrados, especialmente los que están al servicio del emperador. 23El favor del Señor os acompañe.

EXPLICACIÓN.

2-23. La desunión que apuntaba en la comunidad (2,1-4) se manifestaba agudamente en una discordia entre dos mujeres, por otro lado muy dedicadas al evangelio. Se ignora quién fuese el leal compañero a quien alude Pablo; el registro de los vivos, lit. "el libro de la vida" (2-3).

Exhortaciones finales. Alegría (Rom 14,17; Gál 5,22). Actitud ante los de fuera. Oración confiada: su resultado será la paz que Dios comunica reavivando en el hombre la experiencia de su amor (4-7).

Ámbito de interés para los cristianos: todo lo que es bueno dondequiera se encuentre. Nada de comunidad cerrada ni aislada de su ambiente cultural. Para que la alusión sea más clara, usa el término estoico virtud, que nunca se encuentra en los evangelios ni en los escritos de Pablo referido a cristianos (en el NT, sólo en escritos tardíos como 2 Pe 1,3). Para la práctica, los remite a su enseñanza y a su ejemplo (8-9). A diferencia de Romanos o Efesios, en esta carta no se encuentra ninguna diatriba contra las costumbres paganas; al contrario, el blanco de las invectivas de Pablo son los judíos (3,2ss.18s).

Agradecimiento por la ayuda económica. Concepto de la pobreza apostólica: no consiste en buscar privaciones, sino en aceptar cualquier nivel de vida que exija la misión. El apóstol no se condena a la indigencia, pero tampoco la teme. El Señor que da la misión proporciona también las fuerzas para soportar lo que haga falta. Ninguna situación tiene secretos para mí (12), lit. "estoy iniciado en todo y a todo" (10-14). Desde que empecé la misión (15), lit. "en el principio del evangelio", es decir de su actividad evangelizadora en Grecia. Se hizo cargo... haber (15), lit. "participó en cuenta de debe y haber" (15-17). El amor de obra es lo que agrada a Dios y toma el lugar de los antiguos sacrificios (18). Dios responde con su generosidad a la generosidad con los otros (19). Doxología (20).


Despedida; hay cristianos entre los que están al servicio del emperador, lit. los de la casa del César, expresión que puede referirse a los del palacio imperial de Roma (quizá los pretorianos de 1,13), o a empleados de la administración imperial en provincias. Durante su prisión, Pablo debe de haber tenido frecuentes contactos con ellos. El favor del Señor es la expresión de su amor (21-23).

ANTÍTESIS ENTRE LAS DOS MENTALIDADES. 3,17-4,1.

17Hermanos, seguid todos mi ejemplo y tened siempre delante a los que proceden según el modelo que tenéis en nosotros, porque andan por ahí muchos... 18¡Cuántas veces os los he señalado, y ahora lo hago con lágrimas en los ojos, a esos enemigos de la Cruz del Mesías! 19Su paradero es la ruina, honran a Dios con el estómago y ponen su gloria en sus vergüenzas, centrados como están en lo terreno.
20Nosotros, en cambio, somos ciudadanos del cielo, de donde aguardamos como salvador al Señor Jesús, el Mesías; 21él transformará la bajeza de nuestro ser reproduciendo en nosotros el esplendor del suyo, con esa energía que le permite incluso someterse el universo. 4 1De modo que, hermanos míos queridos y añorados, mi alegría y mi corona, mis amigos, manteneos así fieles al Señor.

EXPLICACIÓN.

3,17-4,1. Una vez explicada su postura, Pablo se pone como ejemplo (17). Enemigos de la cruz del Mesías (18), como en 3,2, los judíos; eran éstos quienes se gloriaban de sus vergüenzas, es decir, de la circuncisión; honran a Dios con el estómago (19), lit. "su Dios, el estómago"; se trata, en el caso de los judíos, del valor supremo que atribuyen a las prescripciones sobre alimentos; la traducción procura evitar el malentendido; centrados, cf. Col 3,2; en lo terreno, los ritos y observancias sobre cosas materiales.


La realidad cristiana, en contraste con lo anterior. Somos ciudadanos del cielo, condición actual del cristiano: en la esfera divina o "cielo" está Jesús, objeto de su adhesión, de ella ha recibido el Espíritu que impulsa su vida. Esta ciudadanía ha de ser consumada. Mantiene Pablo su concepción de la venida del Mesías, aunque ya sin el aspecto de inminencia (cf. 1 Cor 7,29); la esperanza de la futura gloria se apoya en el conocimiento de la fuerza de Jesús exaltado, y estimula a la fidelidad (3,20-4,1).

RENUNCIANDO, GANA AL MESÍAS. 3,7-16.


7Sin embargo, todo eso que para mí era ganancia, lo tuve por pérdida comparado con el Mesías; 8más aún, cualquier cosa tengo por pérdida al lado de lo grande que es haber conocido personalmente al Mesías Jesús, mi Señor. Por él perdí todo aquello y lo tengo por basura con tal de ganar al Mesías 9e incorporarme a él, no por tener la propia rectitud que concede la Ley, sino la que viene por la fe en el Mesías, la rectitud que Dios concede como respuesta a la fe. 10Quiero así tomar conciencia de su persona, de la potencia de su resurrección y de la solidaridad con sus sufrimientos, reproduciendo en mí su muerte 11para ver de alcanzar como sea la resurrección de entre los muertos.
12No es que ya haya conseguido el premio o que ya esté en la meta; sino corriendo a ver si lo obtengo, pues el Mesías Jesús lo obtuvo para mí. 13Hermanos, yo no pienso haberlo ya obtenido personalmente, y sólo una cosa me interesa: olvidando lo que queda atrás y 14lanzándome a lo que está delante, correr hacia la meta, para coger el premio al que Dios llama desde arriba por el Mesías Jesús.
15¡A ver, los hombres hechos, ésta es nuestra línea! Y si en algún punto pensáis de otro modo, Dios se encargará de aclararos también eso. 16En todo caso, seamos consecuentes con lo ya alcanzado.


EXPLICACIÓN.

7-16. Después de su conversión, cuando ha desechado todos los valores vigentes en su sociedad, el centro de Pablo no es su "yo", sino Jesús, el Mesías/Salvador. Conocido personalmente (8), sentido del griego gnôsis, conocimiento por experiencia. Pablo no busca ya que Dios lo apruebe por ser fiel a los preceptos de una Ley, sino por su fe en el Mesías; la entrega a éste por la fe/adhesión lo lleva a parecerse a él lo más posible. La incorporación a él por la fe/adhesión resulta en una toma de conciencia de su presencia y actividad (Gál 2,19s), aceptando con él las penalidades (Col 1,24), muriendo con él al pecado (Rom 6,3-5), a la Ley (Gál 1,24), y a los principios del mundo (Rom 12,2; Gál 6,14); esa muerte lleva a la vida (7-11).

Comparación con las carreras en el estadio (cf. Rom 9,30s; 1 Cor 9,24-26). No hay que retroceder, hay que ir adelante. Lo obtuvo para mí (12), pasiva de verbo ditransitivo (katelêmphthên, cf. el inglés "I was given"). No importa lo hecho, sino lo que queda por hacer (12-14).

Los hombres hechos, los cristianos maduros, entre los que Pablo se incluye (cf. 1 Cor 2,6; 14,20); prácticamente equivalen a "los hombres de espíritu" (1 Cor 3,1; Gál 6,1). La actitud propia de ellos es la que acaba de exponer. En la praxis, Dios les irá aclarando los puntos oscuros (15); seamos consecuentes, lit. "sigamos derecho" (16).

IV. OFENSIVA DE LOS PARTIDARIOS DE LA LEY. El ideal que proponen fue el de Pablo. 3,1b-6.

1bRepetiros lo ya dicho otras veces no me cuesta a mí nada y a vosotros os dará seguridad. 2¡Ojo con esos perros, ojo con esos malos obreros, ojo con la mutilación! 3Porque los circuncisos somos nosotros, que damos culto con el Espíritu de Dios y que ponemos nuestra gloria en el Mesías Jesús sin confiar en lo propio nuestro. 4Aunque lo que es yo, ciertamente tendría motivos para confiar en lo propio, y si algún otro piensa que puede hacerlo, yo mucho más; 5circuncidado a los ocho días de nacer, israelita de nación, de la tribu de Benjamín, hebreo de pura cepa y, por lo que toca a la Ley, fariseo; 6si se trata de intolerancia, fui perseguidor de la Iglesia, si de la rectitud que propone la Ley, era intachable.

EXPLICACIÓN.

3,1b-6. Los individuos a quienes ataca Pablo parecen ser judíos, no cristianos judaizantes. Se ve que en Filipos los judíos ejercían un fuerte proselitismo, queriendo imponer sus prácticas religiosas, con el espejuelo de la perfección a que lleva la observancia de una Ley. No es la primera vez que se presenta el problema. Perros, para los judíios animales inmundos, era un epíteto que ellos aplicaban a los paganos; Pablo invierte los términos. Al rito de la circuncisión, que, según los judíos, integraba en el pueblo escogido, Pablo lo califica de "mutilación" (cf. Gál 5,12); el término abstracto está usado por el colectivo: "los circuncisos" o "mutilados". Los verdaderos circuncisos ((los circuncisos somos nosotros, lit. "la circuncisión (abstracto por colectivo) somos nosotros")), es decir, los que realmente gozan de una relación privilegiada con Dios, son los que participan del Espíritu (1b-3). Pablo, como fariseo, centrado en sí mismo y en sus privilegios y méritos personales. La tribu de Benjamín se había mantenido siempre fiel a la dinastía de David; hebreo de pura cepa, lit. hebreo hijo de hebreos, en relación con la gran estima que tenían los judíos de la pureza de sangre (4-6).

III. ENVÍO DE TIMOTEO Y VUELTA DE EPAFRODITO. 2,19-3,1a.

19Con la ayuda del Señor Jesús espero mandaros pronto a Timoteo, para animarme yo también recibiendo noticias vuestras; 20porque no tengo ningún otro amigo íntimo que se preocupe lealmente de vuestros asuntos; 21todos sin excepción buscan su propio interés, no el de Jesús Mesías. 22De Timoteo, en cambio, conocéis la calidad, pues se puso conmigo al servicio del evangelio como un hijo con su padre; 23éste es el que espero mandaros en cuanto barrunte lo que va a ser de mí, 24aunque con la ayuda del Señor, confío en ir pronto personalmente.
25Por otra parte, me considero obligado a mandaros de vuelta a Epafrodito, mi hermano, colaborador y compañero de armas, al que enviasteis vosotros para atender a mi necesidad. 26Él os echaba mucho de menos y estaba angustiado porque os habíais enterado de su enfermedad. 27De hecho estuvo para morirse, pero Dios tuvo compasión de él; no sólo de él, también de mí, para que no me cayera encima pena tras pena. 28Os lo mando lo antes posible, para que viéndolo volváis a estar alegres y yo me sienta aliviado. 29Recibidlo, pues, cristianamente con la mayor alegría; estimad a hombres como él, 30que por la causa de Cristo ha estado a punto de morir, exponiendo su vida para prestarme en lugar vuestro el servicio que vosotros no podíais.
3 1aPor lo demás, hermanos míos, estad alegres con el Señor.

EXPLICACIÓN.


19,3,1a. Escasez de colaboradores (19-21). Estima de Pablo por sus auxiliares. Tito había sido encargado de una delicada misión en Corinto (cf. 1 Cor 4,17). Epafrodito pertenecía a la comunidad de Filipos (22-28). Acogida (29-30). Alegría cristiana (3,1a).

II. EVITAR LAS DIVISIONES. 2,1-18.

2 1Entonces, si hay un estímulo en el Mesías y un aliento en el amor mutuo, si existe una solidaridad de espíritu y un cariño entrañable, 2hacedme feliz del todo y andad de acuerdo, teniendo un amor recíproco y un interés unánime por la unidad. 3En vez de obrar por egoísmo o presunción, cada cual considere humildemente que los otros son superiores 4y nadie mire únicamente por lo suyo, sino también cada uno por lo de los demás.
5Entre vosotros tened la misma actitud del Mesías Jesús:

6Él, a pesar de su condición divina,
no se aferró a su categoría de Dios;
7al contrario, se despojó de su rango
y tomó la condición de esclavo,
haciéndose uno de tantos.
Así, presentándose como simple hombre,
8se abajó, obedeciendo hasta la muerte
y muerte en cruz.
9Por eso Dios lo encumbró sobre todo
y le concedió el título que sobrepasa todo título;
10de modo que a ese título de Jesús
toda rodilla se doble
-en el cielo, en la tierra, en el abismo-
11y toda boca proclame (Is 45,23)
que Jesús, el Mesías, es Señor,
para gloria de Dios Padre.

12Por tanto, amigos, igual que en toda ocasión habéis obedecido, seguid realizando vuestra salvación escrupulosamente, no sólo cuando yo esté presente, sino mucho más ahora en mi ausencia; 13porque es Dios quien activa en vosotros ese querer y ese actuar que sobrepasan la buena voluntad.
14Cualquier cosa que hagáis sea sin protestas ni discusiones, 15para ser irreprochables y límpidos, hijos de Dios sin tacha en medio de una gente torcida y depravada, 16entre la cual brilláis como lumbreras del mundo, manteniendo un mensaje de vida. El día del Mesías eso será una honra para mí, que mis trabajos no fueron inútiles en mis fatigas tampoco. 17Y aun suponiendo que mi sangre haya de derramarse sobre el sacrificio litúrgico que es vuestra fe, yo sigo alegre y me asocio a vuestra alegría; 18pues lo mismo vosotros, estad alegres y asociaos a la mía.

EXPLICACIÓN.

1-18. Indicios de división en la comunidad. Para evitarla, apela a la experiencia cristiana de los filipenses (estímulo, aliento, solidaridad, cariño) (1). Hacedme feliz del todo, lit. "colmad mi alegría". 

La comunidad cristiana se realiza por el amor mutuo, es decir, por la aceptación recíproca, la disposición a ayudar y la identidad de objetivos, aunque no necesariamente de ideas. Los sentimientos de superioridad y las miras egoístas la destruyen (2-4).

Modelo, la actitud de Jesús, el Mesías/Salvador (5): Él poseía la condición divina por la plena comunicación del Espíritu de Dios, pero no quiso actuar en la historia desde el nivel de su superioridad, sino como un hombre cualquiera. Renunció al honor que le correspondía y llegó a entregar su propia vida. No se aferró (6), lit. "no consideró una presa" de la que alardear; se despojó de su rango, lit. "se vació". Presentándose como simple hombre (7), lit. "en su aspecto/en su exterior fue hallado como hombre"; la traducción "presentarse" es el correlativo de "ser hallado"; la frase del original "en su exterior como hombre", implica la carencia de notas distintivas, lo que corresponde a "como simple hombre". Título (9): el griego onoma indica una designación de la persona, por su nombre, calidad, dignidad o función; aquí se refiere a Señor (11) que es título de dignidad (cf. Ef 1,23).

La obediencia o respuesta de Jesús es total: acepta incluso la muerte en cruz (8). Exaltación como consecuencia de su abajamiento. Señor (11) título divino. La divinidad del Hombre Jesús, oculta en un principio, ha de ser reconocida universalmente; para gloria de Dios Padre, (10-11). La calidad poética y la simetría de este pasaje (2,6-11), su estilo y contenido, tan diferentes de lo que precede y sigue, sugieren que se trata de un poema o himno cristiano ya existente, que Pablo inserta en la carta, quizá adaptándolo.

Amigos míos (12), lit. "queridos míos". Por su paralelo con la obediencia/respuesta de Jesús, también la de los filipenses es obediencia a Dios; por lo demás, en el contexto de la relación Padre-hijos, no significa sumisión, sino, como en Jesús, la libre respuesta inspirada por el amor. Escrupulosamente, lit. "con temor y temblor", cf. 2 Cor 7,15; Ef 6,5. No faltan medios para actualizar la salvación, pues Dios mismo ayuda y capacita (13). La oposición entre querer y obrar, propia del régimen de la Ley (Rom 7) queda superada en el régimen de la gracia/amor: el hombre puede ser consecuente con sus principios.


Para ir haciendo realidad la salvación, vivir unidos sin discordia (14): la unión es la que hace hijos de Dios; ella es la que purifica (cf. Ef 1,4) (15). Este testimonio de concordia es el que el mundo necesita, y ése es el objetivo que Pablo pretende con su labor (16). La iglesia ha de ser "esperanza hecha visible" del ideal humano de fraternidad y ayuda mutua. Mi sangre haya de derramarse (17), lit. "que yo sea derramado”; el sacrificio litúrgico, lit. "el sacrificio y la liturgia", hendíadis. Los términos cultuales se aplican a la vida cristiana en su doble dimensión de fe/fidelidad a Dios y amor al prójimo. Si dar culto significa honrar a Dios, para el cristiano el culto es la vida misma en la práctica del amor (cf. 4,18; Rom 12,1s; 1 Pe 2,9). Las dificultades no son motivo de tristeza, sino de alegría (18).